McQueen

La vida es tan corta que cualquier instante se hace único e inimitable. Hace unas horas, en uno de los meses más ocupados de mi carrera, tuve la suerte de conocer a Tom Ford, uno de los grandes creadores de la moda actual. De hecho venía con la idea de darle un homenaje en el que hablara de su peli, del sexo hecho arte, las prendas de moda que sientan como un guante, y, sobre todo, la capacidad para no ser un florero y pensar por sí mismo...
Pero hoy, como un jarro de agua fría, nos enteramos de que Alexander McQueen, otro de los gurús de la moda moderna, el creador de una marca con estilo propio, ha sido encontrado muerto en su casa. El hombre que dio una vuelta al clasicismo británico, el que provocó, el que diseñó, el que rompió moldes. Y te das cuenta de que nadie es nadie. De que en mi primer viaje a Londres me encantó su ropa, y prometí que algún día podría permitírmela. Que el día que compré mi pañuelo de calaveras, suave, elegante, nadie llevaba calaveras, y dos años después todo el mundo copió el estilo de McQueen...
De los tres mosqueteros de la gran moda actual, Alexander McQueen, Tom Ford y Marc Jacobs, se ha ido el más polémico, el más artista, el más transgresor.
Hoy es el día para el que la moda sea una, para que el arte sea otro. Para darle un homenaje a McQueen.